miércoles, 24 de agosto de 2011

Borges ha nacido


Acaso porque estas formas breves de poesía a Borges le gustaban, me permito hacer estos haikus en homenaje a nuestro gran escritor por el centesimo decimo segundo aniversario de su nacimiento.


*

en esos ojos
que luego se morirán
llorará fuego

*

no hay ciudades
tampoco bibliotecas
sin tu luz sombra

*

la eternidad
es sentirse en muerte
y así llorar

*

ojo espejo
que nunca se refleja
pero que guía

*

palermo dublin
sea ginebra o bien
toda islandia

*

cuerpo de libro
cada página aire
de tus ideas

*


el niño borges

martes, 23 de agosto de 2011

Borges y Google




Con motivo de los 112 años del natalicio de nuestro escritor Google ha mostrado en su página de inicio una interesante pintura que muestra a un hombre con un bastón observando las vastas construcciones de una ciudad futurista. Lo único que realmente representa al estilo borgeano son las bibliotecas que aparecen al costado del hombre pero dentro de todo, es medio complicado asociar esa imagen a nuestro autor. El inmenso observatorio no me remite a nada en particular.

(de hecho, este doodle bien puede haberse usado en conmemoración de algún escritor futurista como Philip Dick o alguno de esos.)

Probablemente el ilustrador de este doodle haya querido mostrar algo parecido a esos laberintos de los que JLB tanto hablaba. Pero es medio exagerado conjeturar semejante hipótesis.

viernes, 5 de agosto de 2011

Borges y los poetas

Pienso que Mark Twain fue uno de los escritores verdaderamente grandes, pero veo que no se daba cuenta de eso. Pero tal vez, para poder escribir un libro realmente, uno debe ignorarlo. Uno puede trabajar como un esclavo y cambiar cada adjetivo por otro, pero tal vez se pueda escribir mejor dejando los errores. Recuerdo que Bernard Shaw dijo, con respecto al estilo, que un escritor tiene tanto estilo como se lo permita su convicción, y nada más. Shaw creía que la idea de un juego de estilo eran una tontería, sin significado. Pensaba que Bunyan, por ejemplo, era un gran escritor porque estaba convencido de lo que decía. Si un escritor descree de lo que escribe, difícilmente puede esperar que lo crean sus lectores. En este país (Argentina), sin embargo, existe una tendencia a considerar cualquier clase de escritura -especialmente la escritura de poesía- como un juego de estilo. He conocido a muchos poetas de aquí que escriben bien...excelentes cosas, con un espíritu delicado y todo eso, pero si uno habla con ellos solo cuentas historias sucias o hablan de política como lo hace todo el mundo, de modo que su escritura resulta ser una especie de espectáculo de relleno. Habían aprendido a escribir de la misma manera que cualquiera aprendería a jugar al ajedrez o al bridge. En realidad no eran en absoluto poetas ni escritores. Era una treta y un truco que habían aprendido, y lo habían aprendido bien. Lo manejaban al dedillo. Pero casi todos -salvo cuatro o cinco, debo agregar- parecían pensar que la vida no tenía nada poético ni misterioso. Dan todo por hecho. Saben que cuando tienen que escribir...bien, entonces deben ponerse repentinamente tristes o irónicos.

En Confesiones de Escritores: Escritores Latinoamericanos. Los reportajes de The Paris Review, 1995.